29 de abril de 2007

Política como opción de vida, Democracia Cristiana como Instrumento

Por Natalia Badenier Martinez
Estudiante Trabajo Social

P. Universidad Católica de Valparaíso


Para los jóvenes, actualmente, resulta extraño encontrarse con uno de sus pares que participe en política y, más aún, la extrañeza es mayor cuando la participación se hace dentro de un partido político.

Cabe preguntarse, en primera instancia, cual es el motivo a estar en política cuando ésta permanece degradada y ensuciada por los mismos que la ejercen, o con el mejor de los ejemplos: cuando los jóvenes no se inscriben en los registros electorales.

En estas circunstancias, parece interesante la reflexión desde nosotros el por qué los jóvenes no participan en política, pero sí, generalmente, en organizaciones sociales de ayuda a la comunidad, grupos de ayuda social, las que están integradas mayormente por jóvenes de 15 a 25 años.

La política surge a partir de un juicio de valor sobre la realidad, este se concreta mediante la acción.

La decisión de participar en política radica en el interés y el desafío por concretar aquellos sueños, de tal manera que mediante ésta se aboca todo el interés al servicio público, donde queramos construir comunidades solidarias y participativas.

Al afirmar que la acción se concreta en la participación, en donde la acción política tiene un objetivo determinado, se resalta la idea de que aquella acción tenga implícito un conjunto de valores y principios, es ahí donde la decisión de llevar a cabo la política se torna en la Democracia Cristiana.

“El saber práctico supone que el ordenamiento a la acción está ya en los principios” (Jaques Maritain)

En la opción política se expone la fuerte voluntad de participación no tan solo del sufragio, sino también en trabajar para implementar nuestra visión. Donde exponemos el sueño y el accionar político como camino e instrumento de transformación de la realidad.

Se demócrata cristiano en este tiempo, implica considerar que en la acción, la existencia del otro depende también de uno mismo, que la conciencia de si mismo, pasa también por la construcción de comunidad. En donde está implícito el ideal de sociedad fundada en los valores del humanismo cristiano, aquellos que hacen priorizar el bien común, la justicia y la libertad. Estamos llamados a ser un partido de vanguardia. Personalmente mi tarea es también inspirada por llevar a cabo la visión que nos dejó Jesús, esa misión trascendental de construir comunidad mediante los valores cristianos.

Para finalizar y al mismo tiempo seguir motivando la acción ligada con fuertes principios resulta necesario e imprescindible recordar a Eduardo Frei Montalva y uno de sus mensajes dirigidos a los jóvenes: “Tengan ustedes no solo gritos, sean portadores de un mensaje. Tengan ideas en la cabeza y no solo entusiasmo, porque así siempre marcaran un rumbo”.


Artículo publicado en el Boletín MM2 del Partido Democrata Cristiano del Distrito 14, Viña del Mar-Con-Con, a continuación imagen de su versión Original.


2 comentarios:

Jdc Magallanes dijo...

un saludo afectuoso desde magallanes



Cristian Ramos


Presidente Provincial JDC Magallanes

Anónimo dijo...

el error de ensuciar la politica juvenil es involucrando niños de 15 a 17 años. lo vivimos la protesta secundaria del año pasado, donde lideres politicos regionales y metropolitanos nisiquiera sabian los 14 puntos del petitorio.
¿a que abarcamos?
a construir una serie de politicas sin conciencia, tomando el claro ejemplo de la poca evolucion de estos jovenes en este lapso, estan preocupados de posear la marca registrada, es decir, su partido politico. y esto pasa mayoritariamente, es comun verlo.
ahora, el fin de la jdc es un bien sicual, religioso y cultural... como muchos toman a los de derecha como dictadores e "hijitos de papa"
o a los comunistas como unos idealistas sin rubmos, unos aprovechadores, etc.

no portemos el ideal con niños, sino con gente que tenga madurez, inteligencia y sobretodo capacidad y expresion.

para hacer efectivo esta expansion de ideales se debe tener conciencia, y esto es lo que carecen los jovenes.

FrAn